La noche del 16 de abril fue una carrera contra el reloj para los zulianos. En el último día de apertura del Registro Electoral, cientos de jóvenes acudieron desde tempranas horas a la sede regional del Consejo Nacional Electoral (CNE) en Maracaibo. La demanda fue tan alta que la jornada se extendió hasta la medianoche. La cola se alargaba y acortaba con el pasar de las horas, a medida que se extendía la noticia de que el CNE estaría recibiendo cédulas hasta las 11:59 de la noche.
María Gabriela García, de 18 años, estudiante de psicología de la URU, llegó al CNE a las 2 de la tarde y salió inscrita a las 9:00pm. «Con sed, calor y hambre, pero me inscribí. Más cansada estoy de esta situación», declaró.
En la avenida El Milagro, al norte de la ciudad, solo tres máquinas estaban disponibles para su proceso. Jean Carlos Valle, de 23 años, llegó a la sede a las 5:00 p.m. con la esperanza de inscribirse. No fue hasta las 9:30 p.m. que pudo salir victorioso de la larga fila de espera en el CNE.
Después de varias horas de pie en la acera y una calurosa noche, Jean se sintió satisfecho de poder participar en las elecciones presidenciales del 28 de julio. “Cualquier cosa que haya que hacer para lograr un cambio en este país, lo haremos”, afirmó.
A la salida de Jean, decenas de jóvenes, como él, aspiraban a entrar al sistema electoral ese mismo día y ejercer su voto en los próximos comicios. Aunque el Consejo Nacional Electoral normalmente cierra a las 4:00 p.m., anunció que en este último día de jornada, el horario se extendería hasta las 12:00 a.m. Dentro de las oficinas, una segunda fila de al menos 50 jóvenes esperaba, habiendo avanzado desde la calle hasta las puertas del órgano rector. Todo indicaba que la alta demanda llevaría las labores de registro hasta la madrugada.