El hospital F.D.Roosevelt de Banská Bystrica informó el domingo que la vida del primer ministro eslovaco, Robert Fico, está fuera de peligro tras haber sido ingresado en estado grave el 15 de mayo por recibir cuatro disparos.
El paciente necesita tiempo para recuperarse, según indicaron los médicos. Tras dos operaciones y la extirpación de tejido necrótico en una segunda intervención quirúrgica, el pronóstico de Fico mejoró notablemente.
El viceprimer ministro, Robert Kaliňák, expresó alivio ante la noticia y señaló que lo peor ya pasó. Aunque no se contempla su traslado inmediato a Bratislava debido a su estado de salud.
El agresor, Juraj Cintula, de 71 años, confesó haber disparado contra Fico debido a desacuerdos con sus políticas. El juez dictó prisión preventiva para Cintula, quien enfrenta cargos por asesinato premeditado con penas que podrían llegar hasta cadena perpetua.
Las medidas controvertidas impulsadas por Fico, como la abolición de la Fiscalía Especial anticorrupción y la fiscalización de las ONG, generaron protestas ciudadanas desde su regreso al poder en otoño.
Cintula, con vínculos previos a una organización paramilitar de extrema derecha, manifestó opiniones racistas y proviene de una región afectada por altos niveles de desempleo.
