El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, anunció esta mañana que, después de un período de reflexión, decidió seguir al frente de la Presidencia de España con más determinación que nunca.
En su comparecencia, Sánchez afirmó: “Esta decisión no supone un punto y seguido, es un punto y aparte”. El líder socialista también mencionó que su familia sufrió acoso durante los últimos 10 años y que, en ocasiones, la única forma de avanzar es detenerse y reflexionar.
La movilización social influyó positivamente en su elección, y Sánchez agradeció las muestras de apoyo, especialmente de su partido, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Antes de su anuncio público, comunicó su decisión al rey Felipe VI y se reunió con la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán. Además, convocó a todo el personal de Moncloa tras su comparecencia.
La situación se precipitó la semana pasada cuando Sánchez publicó una carta abierta en su perfil oficial de una red social sin sello de ningún tipo, ni del PSOE ni de la Presidencia del Gobierno. En la carta, anunció que suspendería su agenda pública durante cinco días para reflexionar sobre si continuaría en el cargo. También denunció “la gravedad de los ataques” que él y su esposa, Begoña Gómez, reciben. Señaló al presidente del conservador Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, y al líder ultraderechista de Vox, Santiago Abascal, como “colaboradores necesarios junto a una galaxia digital ultraderechista”.
