La histórica catedral de Notre Dame de París reveló hoy su esperado «resplandor» al mundo en una visita especial del presidente francés, Emmanuel Macron, a tan solo ocho días de su próxima reapertura luego del devastador incendio que la dejó gravemente afectada en abril de 2019.
Mientras el mundo aguarda con ansias la oportunidad de volver a recorrer esta joya arquitectónica gótica, las cadenas televisivas francesas e internacionales transmiten en vivo la visita de Macron, mostrando así el interior restaurado del icónico edificio.
Emmanuel Macron, acompañado por su esposa Brigitte, llegó a primera hora de la mañana a las obras de Notre Dame bajo un espléndido sol.
Esta visita representa un emotivo preludio antes de la tan esperada reapertura de la mundialmente reconocida catedral, programada para los días 7 y 8 de diciembre. Durante su recorrido por la iglesia gótica, Macron tiene la intención de expresar gratitud a todos los involucrados en la monumental tarea de reconstrucción que ha llevado más de cinco años.
«Ahora más hermosa que nunca, con el resplandor redescubierto de sus piedras doradas y el esplendor de sus capillas», mencionó el mandatario de centroderecha en un comunicado dirigido a los medios de comunicación.
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Los trabajos de restauración han logrado eliminar la suciedad acumulada a lo largo de las décadas, revelando la pureza «inmaculada» del emblemático edificio católico, que se presenta deslumbrante como nunca antes.
Hasta este momento, solo circulaban imágenes no autenticadas en redes sociales, como X, incluso respaldadas por el multimillonario Elon Musk.
La Presidencia francesa utilizó términos impactantes para describir la visita de hoy: «resplandor», «fascinación», «impacto visual», «explosión de colores», entre otros.
Prometiendo un espectáculo impactante que contrastará notablemente con las desoladoras escenas que Macron encontró la fatídica noche del incendio en 2019.
Un total de 2,000 personas que contribuyeron a la restauración fueron invitadas a esta visita, donde estarán presentes el presidente, su esposa y el arzobispo de París, Laurent Ulrich.
Se prevé que al menos 1,300 asistentes participen de esta ocasión especial. Macron aprovechará la oportunidad para agradecer personalmente a todos los que dedicaron tiempo y esfuerzo a devolverle la vida a la catedral, desde carpinteros y canteros hasta arquitectos y arqueólogos.
Además, el presidente rendirá homenaje a los generosos mecenas, ya que el proyecto de restauración ascendió a unos 700 millones de euros (alrededor de 740 millones de dólares al cambio actual) y fue financiado íntegramente mediante donaciones altruistas.