El ejército israelí informó este domingo, 29 de septiembre de 2024, que más de 20 miembros de Hezbolá murieron en un bombardeo realizado el viernes contra el cuartel general del grupo islamista en los suburbios de Beirut. Este ataque, parte de la operación «Nuevo Orden», resultó también en la muerte del líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah.
#Israel lanzó la un ataque sin precedentes contra residencial en los suburbios de Beirut, donde se hallaba la sede central del grupo chií libanés Hezbolá. #Beirut se encuentra en máxima tensión por la muerte del líder de Hezbolá, Hasán Nasralá. Hay temor por la reacción de Irán. pic.twitter.com/owYP70geD6
— contacto.news (@contactonews1) September 28, 2024Según el comunicado, los terroristas abatidos estaban involucrados en operaciones contra Israel desde una base subterránea situada bajo edificios civiles. Además, se confirmó la muerte de Nabil Kaouk, jefe adjunto del Consejo Central de Hezbolá, lo que marca un golpe significativo para la organización.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reafirmó su compromiso con la ofensiva contra Hezbolá y advirtió que «el trabajo aún no ha terminado». La situación ha provocado reacciones internacionales, incluyendo un llamado de Irán para una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU.
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La violencia ha desplazado a miles de residentes en Beirut y ha dejado un saldo creciente de muertos y heridos. La crisis humanitaria se agrava en medio de las tensiones entre Israel y Hezbolá, que parecen estar atrapados en un ciclo destructivo sin una resolución a la vista.
