El gobierno colombiano y una estructura disidente de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) acordaron este domingo 25 de mayo de 2025 la creación de una Zona de Ubicación Temporal (ZUT) para garantizar la seguridad y la incorporación progresiva a la vida civil de 120 miembros de esta agrupación armada. Este acuerdo forma parte de los diálogos de paz que el gobierno del presidente Gustavo Petro, el primer mandatario de izquierda en la historia reciente de Colombia, sostiene con la Coordinadora Nacional del Ejército Bolivariano (CNEB), una coalición que agrupa a disidencias de las FARC.
El acuerdo fue firmado al término del quinto ciclo de negociaciones, que se extendió durante cuatro días en una zona del suroeste colombiano, específicamente en los departamentos de Nariño y Putumayo. Según el acta oficial divulgada por la Consejería Comisionada de Paz a través de su cuenta en la red social X, la ZUT estará dividida en dos grupos de 60 integrantes cada uno, quienes serán ubicados temporalmente para recibir capacitación integral y avanzar en su proceso de reincorporación a la vida civil.
La delimitación exacta de los espacios y los aspectos jurídicos y técnicos que regirán la zona serán definidos en una próxima reunión programada para el 28 de mayo en Tumaco, ciudad estratégica en la región del Pacífico colombiano. El documento oficial resalta que esta medida responde a la “necesidad de avanzar en la construcción gradual de la transformación de los territorios”, permitiendo que los combatientes puedan integrarse plenamente a la sociedad.
Este acuerdo se suma a la creación reciente de una zona especial similar en la convulsa región del Catatumbo, en el nororiente del país, destinada al Frente 33, otra disidencia de las FARC que no se acogió al Acuerdo de Paz de 2016. La estrategia del gobierno busca así abrir espacios para la desmovilización y reincorporación de grupos armados que permanecen activos, en un intento por consolidar la paz en regiones afectadas por décadas de conflicto.
La Coordinadora Nacional del Ejército Bolivariano, que actualmente reúne a las agrupaciones “Coordinadora Guerrillera del Pacífico” y “Comandos de la Frontera”, inició sus diálogos con el gobierno en 2024, cuando aún formaba parte de la disidencia conocida como “Segunda Marquetalia”. Posteriormente se separaron, argumentando la intención de continuar negociaciones con el Estado ante la falta de cumplimiento de compromisos pactados por otros sectores.
Lea también: Incendio controlado en la principal refinería de Ecuador en Esmeraldas
No obstante, la implementación de las Zonas de Ubicación Temporal enfrenta retos importantes. Analistas advierten que la seguridad de los combatientes debe ser garantizada frente a la presencia y posibles ataques de otras organizaciones armadas ilegales que operan en la región, lo que podría poner en riesgo la estabilidad del proceso.