Este jueves 28 de noviembre, un edificio del conjunto residencial Privilegios en Campo Alegre, Barranquilla, colapsó, dejando al menos cinco heridos, entre ellos cuatro niños.
La situación ha generado gran preocupación en la comunidad.
El colapso ocurrió en una torre que había sido desalojada años atrás por sus condiciones estructurales deterioradas. A pesar de las advertencias, se presume que un apartamento estaba habitado durante el incidente.
Los organismos de socorro lograron rescatar a los menores atrapados entre los escombros, mientras continúan las labores para encontrar a una mujer que permanece bajo los escombros.
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Los residentes han denunciado durante años el riesgo estructural en la zona, lo que ha reavivado el debate sobre la seguridad de las edificaciones en Barranquilla.
La falta de acción por parte de las autoridades y las constructoras responsables ha sido un tema recurrente en la comunidad.
Este trágico suceso pone de manifiesto no solo el deterioro físico de las estructuras, sino también la necesidad urgente de una mejor regulación y supervisión en la construcción y mantenimiento de edificios en Barranquilla.
La comunidad exige respuestas y acciones concretas para evitar futuras tragedias.
