El Real Madrid se impuso por 3-0 al Valladolid en el Santiago Bernabéu, pero la victoria no logró ocultar las deficiencias del equipo en un partido marcado por la esperada presentación de Kylian Mbappé ante la afición merengue. El delantero francés, fichaje estrella del club, no pudo estrenarse con gol y fue sustituido en el segundo tiempo, dejando un sabor agridulce en el debut del Madrid en casa.
El primer tiempo fue decepcionante para los aficionados del Real Madrid, que esperaban ver a un equipo inspirado liderado por Mbappé. Sin embargo, el partido se mantuvo cerrado, con un Valladolid bien plantado atrás y un equipo incapaz de generar oportunidades claras. Mbappé apenas tuvo un remate contenido por el portero tras un pase largo de Rüdiger, y los abucheos acompañaron a los jugadores al descanso con el marcador 0-0.
Fue en el segundo tiempo cuando el Madrid logró desatascar el partido. Al minuto 50, un tiro libre de Valverde, desviado, se coló pegado al palo para poner el 1-0. El Valladolid tuvo la oportunidad de empatar, pero no la aprovechó. Brahim Díaz sentenció el partido con el 2-0 tras colarse entre dos defensas y definir cruzado.
En el tiempo de descuento, Endrick, recién ingresado por Mbappé, marcó el 3-0 final con un disparo desde la entrada del área. Una victoria que no logró ocultar las carencias del equipo, especialmente en la primera mitad, cuando Mbappé no logró conectar con sus compañeros ni generar peligro.
Lea también: Luis Díaz brilla en el triunfo del Liverpool sobre Brentford
El Real Madrid se lleva los tres puntos en su debut en el Bernabéu, pero la victoria no disipa las dudas sobre el rendimiento del equipo. Mbappé, la gran esperanza merengue, no pudo estrenarse con gol y fue sustituido, dejando un sabor agridulce en la afición. El Madrid tendrá que mejorar su juego si quiere defender con éxito el título de Liga, comenzando por encontrar la mejor versión de su estrella francesa. La victoria, aunque importante, no oculta que el equipo aún tiene margen de mejora.