Rafa Nadal se quedó a las puertas de conseguir su título número 93 en el ATP 250 de Bastad, tras perder en la final contra el portugués Nuno Borges por 6-3 y 6-2. A sus 38 años y en la que fue su final número 131 en el circuito, el balear no pudo sumar un nuevo trofeo, lo que marca un momento significativo en su carrera, especialmente considerando que no caía en una final sobre tierra batida desde 2015.
El objetivo de Rafa Nadal
Rafa llegó a Bastad con el objetivo de prepararse para los Juegos Olímpicos de París, después de una decepcionante primera ronda en Roland Garros donde fue eliminado por Alexander Zverev. Decidió omitir el torneo de Wimbledon para concentrarse en el polvo de arcilla, buscando así mantenerse en forma para su última participación olímpica. A pesar de la derrota, el torneo le sirvió para acumular minutos en la pista y evaluar su estado físico.
FIRST TITLE FEELS 🤩
The moment @nunoborges97 defeated Nadal for his first ATP title!#NordeaOpen pic.twitter.com/19229wDur1
— Tennis TV (@TennisTV) July 21, 2024Durante la semana, Rafa Nadal mostró destellos de su calidad habitual, logrando remontadas y resistiendo largas batallas en la cancha. Sin embargo, la final contra Borges evidenció problemas en su saque, un aspecto crucial en su juego. El español terminó el primer set con un 58% de efectividad en su primer servicio, lo que facilitó el camino a Borges, quien utilizó los errores de Nadal.
El inicio del partido no fue el esperado para Nadal, quien se mostró irregular con su servicio. Borges, que había jugado seis horas menos que el español en el torneo, logró romper el saque de Rafa en varias ocasiones, estableciendo un 4-2 a su favor sin que el balear pudiera anotar un juego al saque. Aunque Nadal finalmente logró ganar un juego, el primer set se cerró con un claro dominio del portugués.
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En el segundo set, Nadal intentó cambiar la dinámica, logrando salvar un juego en el que Borges tuvo una oportunidad de break. Sin embargo, la remontada se esfumó rápidamente cuando Borges volvió a romper el saque de Nadal, consolidando su ventaja y cerrando el set con un contundente 6-2. Este triunfo no solo significó el primer título ATP para Borges, sino que también truncó la racha de Nadal, quien desde 2004 no había tenido una temporada sin títulos.
A pesar de la derrota, Nadal se mostró positivo al finalizar el torneo. «Ha habido momentos muy buenos en la semana. Hoy no ha sido mi mejor día, pero ha sido una semana positiva. He disfrutado, no sé si volveré, probablemente no, pero muchas gracias por todo el apoyo y cariño recibido», comentó el español.
