La Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) ha condenado la incursión de comandos combinados de la policía y fuerzas de seguridad en la embajada de México en Ecuador. Esta operación, llevada a cabo el viernes, tenía como objetivo extraer al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, a quien se le había concedido el derecho de asilo.
El gobierno de México ha anunciado el fin de las relaciones diplomáticas con Ecuador tras los incidentes. Glas, quien fue juzgado en 2017 por soborno y relación con la trama de Odebrecht, había obtenido la libertad en noviembre de 2022 y desde diciembre pasado se encontraba en la sede diplomática mexicana.
La OEA ha recordado a sus estados miembros que “el derecho internacional es norma de conducta de los Estados en sus relaciones recíprocas” y ha hecho un llamado a cumplir con la protección de los locales que sirven a la diplomacia. Además, la organización regional ha expresado su solidaridad con “quienes fueron víctimas de las acciones improcedentes que afectaron a la embajada de México en Ecuador”.
La OEA ha instado a un diálogo entre ambas partes y ha mostrado su interés por la celebración de una reunión de su Consejo Permanente para tratar estos asuntos. Varios gobiernos de la región, incluyendo Venezuela, Honduras, Cuba, Brasil y Colombia, han expresado su preocupación por lo ocurrido y han condenado la acción.