Tras dos semanas de declaraciones de 20 testigos, la fiscalía del distrito de Manhattan finalizó la presentación de sus argumentos contra el expresidente Donald Trump.
El caso culminó con un extenso interrogatorio a Michael Cohen, su antiguo hombre de confianza, dejando al jurado listo para evaluar la veracidad de los testimonios.
Durante el segundo día de la defensa, la intervención comenzó con la intención de desacreditar a Cohen, pero el segundo testigo llamado por los abogados de Trump se vio envuelto en una disputa con el juez Juan Merchan. A pesar de la brevedad esperada de la defensa, Merchan indicó que los alegatos finales se pospondrán hasta la próxima semana.
El expresidente enfrenta cargos por falsificación de registros comerciales relacionados con el pago de 130.000 dólares para silenciar a la actriz porno Stormy Daniels. Trump negó las acusaciones y cualquier encuentro con Daniels. En caso de ser declarado culpable, podría enfrentar prisión o libertad condicional.
Durante el día 19 del juicio a Trump, la defensa llamó a Robert Costello, exasesor legal de Cohen, cuyo testimonio fue interrumpido por objeciones y una reprimenda del juez Merchan. Además, los fiscales abordaron una llamada telefónica crucial realizada en 2016.