Este lunes, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hizo un llamado urgente al Congreso para aumentar el personal del Servicio Secreto, después de un reciente intento de asesinato contra el exmandatario Donald Trump.
Este incidente se suma a una creciente preocupación sobre la seguridad de los candidatos políticos en el país.
Durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca, Biden declaró: «Una cosa que quiero dejar clara es que el Servicio (Secreto) necesita más ayuda, y creo que el Congreso debería responder a sus necesidades».
Su declaración se produce tras un tiroteo ocurrido el domingo cerca del campo de golf de Trump en Florida, donde un hombre armado fue detenido por agentes del Servicio Secreto.
El sospechoso, Ryan Wesley Routh, de 58 años, fue acusado de posesión ilegal de armas y se espera que enfrente cargos adicionales.
Según informes, Routh fue arrestado después de que un agente del Servicio Secreto observó un rifle apuntando hacia los arbustos del Trump International Golf Course.
La situación ha intensificado las preocupaciones sobre la seguridad en campañas electorales.
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La exdirectora del Servicio Secreto, Kimberly Cheatle, renunció en julio tras un ataque similar contra Trump durante un evento de campaña.
Biden concluyó su declaración expresando alivio por la seguridad de Trump: «Gracias a Dios» se encuentra bien tras el incidente.
Este llamado a la acción resalta la necesidad urgente de revisar y fortalecer las medidas de seguridad para proteger a todos los candidatos en el contexto electoral actual.
