«El 30 de junio no seguiré como entrenador del Barcelona», informó Xavi Hernández, técnico del Barcelona, este sábado 27 de enero, casi una hora y media después de la derrota frente al Villarreal.
ESPN señaló que Hernández se encerró en su vestuario y allí espero a Joan Laporta. Y le comunicó, tal como haría después públicamente, que al acabar la temporada dejará su puesto en el banquillo.
«El 30 de junio dejaré el club. Es una decisión que tenía meditada con el staff y que hemos acordado con el presidente. El Barça necesita un cambio de rumbo y pienso que como culé lo mejor es que me marche al acabar la temporada porque eso ayudará a que cambie la dinámica», dijo en la conferencia.
El entrenador catalán expresó su necesidad de un cambio debido a la dinámica negativa del equipo. Afirmó que no podía encontrar una explicación para los resultados adversos y que era necesario destensar la situación.
Asimismo, explicó que había tomado la decisión hace tiempo, pero que si el equipo hubiera ganado el partido, probablemente habría esperado para hacer el anuncio. Sin embargo, argumentó que entrenar al Barcelona conlleva un gran desgaste a todos los niveles.
A su vez, aclaró que su determinación no cambiaría incluso si el Barcelona ganara la Champions. Aunque expresó optimismo y afirmó que lucharían en la competición, dejó claro que su marcha era inevitable.
«Me siento el máximo responsable. Creo que se ha trabajado muy bien pero pienso que esta decisión ayudará a los jugadores y destensará al club. Estoy bien, pero hace días que tenía decidido esto y no quiero ser una rémora para el Barça. No seré un problema. Nunca seré un problema para el Barça», resumió.


