El Memorial Day, o Día de los Caídos, es un día de luto nacional en Estados Unidos destinado a recordar a los militares caídos de la nación. Sin embargo, con el tiempo, ha llegado a marcar el inicio no oficial del verano y un fin de semana largo de descuentos en todo, desde colchones hasta cortadoras de césped.
Para personas como Manuel Castaneda Jr., el Día de los Caídos es muy personal. Castaneda perdió a su padre, un marine estadounidense que sirvió en Vietnam, en un accidente en 1966 en California mientras entrenaba a otros marines. “No se trata sólo de los especiales. No se trata sólo de la barbacoa”, dijo Castañeda. Aunque intenta no juzgar a los demás que pasan las vacaciones de manera diferente, para él, el día lleva un peso emocional significativo.
El Día de los Caídos es un día de reflexión y recuerdo de aquellos que murieron mientras servían en las Fuerzas Armadas de Estados Unidos. El feriado se observa en parte por el Momento Nacional del Recuerdo, que anima a todos los estadounidenses a hacer una pausa a las 3 p.m. para un momento de silencio.
El Día de los Caídos tiene sus raíces en la Guerra Civil estadounidense, en la que murieron más de 600.000 miembros del servicio. La primera celebración nacional del Día de los Caídos, entonces conocido como Día de la Decoración, ocurrió el 30 de mayo de 1868. Sin embargo, la práctica ya estaba muy extendida a nivel local.
A lo largo de los años, ha habido controversia sobre el verdadero significado del Día de los Caídos. Ya en 1869, The New York Times escribió que el día feriado podría volverse “sacrílego” y dejar de ser “sagrado” si se centra más en la pompa, las cenas y la oratoria que en su propósito original.