Curiosamente, Mairín abre una gaveta y hay un tesoro devaluado de monedas. Mairín abre un cofre y hay unos anillos que a nadie le quedan. Mairín abre un libro y encuentra la estampita de una santa marcando la última página que alguien leyó. Mairín abre un clóset y encuentra los dientes que el Ratón Pérez guardó hace décadas.
Mairín Reyes abre lugares, saca cosas, toma fotos, hace inventarios, desenreda cables, protege vasos, embalsama barbies en cajas de cartón, apila peluches en bolsas negras, desmonta hogares: es una oficiante de la memoria de los que se marcharon de Venezuela.
‘Soluciono por ti’ es el nuevo proyecto de Reyes, el cual tiene como fin dirigirse a casas y departamentos de migrantes ‘para vaciarlas y ordenarles los recuerdos’.
“Lo recurrente en la mayoría de clientes que he atendido es que están fuera del país y dejaron la puerta cerrada pensando que iban a volver y no volvieron. De algo tan doloroso como la migración, yo encontré una oportunidad. ‘Organización del hogar’, lo llamo yo”, dice Reyes, una peculiar caraqueña que siente pasión por el orden y empatía con quienes se han marchado.
“A mí entrar a cada casa me da muchísima tristeza. Más allá de las razones que llevan a cada quien a migrar, porque siempre hay una razón de peso, siempre me impacta ver tantas cosas dejadas. Me imagino a la familia riéndose en esa sala, siendo felices. Ves que las cosas se adquirieron con cariño. Lo que encontrás es lo que te habla de la gente: hay testimonios del amor que ahí hubo”, añadió.