El presidente de la República, Nicolás Maduro, alertó este martes que Venezuela enfrenta nuevas formas de dominación, sanciones criminales, bloqueos, guerras psicológicas, guerras híbridas y frente a nosotros la amenaza de una guerra mundial. «Por eso Carabobo es un espejo del presente y la respuesta sigue siendo la misma, unión, claridad, coraje y confianza en nuestro pueblo».
Durante un mensaje transmitido desde el Palacio de Miraflores con motivo a la conmemoración por los 204 años de la Batalla de Carabobo y Día del Ejército Bolivariano, el jefe de Estado destacó que Venezuela es el gran bastión de resistencia y esperanza del sueño de Bolívar.
Destacó el carácter revolucionario de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, que calificó como heredera directa del ejército popular que triunfó en Carabobo.
«Nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana no es un aparato: es conciencia viva. Su doctrina es bolivariana, popular, defensora de la paz», expresó el Comandante en Jefe, quien recordó que «en cada soldado, en cada miliciano, Carabobo sigue respirando», añadió.
Por otra parte, Maduro refirió que hoy cuando el sionismo agrede a Palestina, a Siria, al Líbano, a Irak, a Yemen y a la República Islámica de Irán, Venezuela propone una cumbre mundial por la paz al tiempo que pidió espeto a la autodeterminación de los pueblos. «Pedimos respeto al derecho público internacional».
«Cuando el sionismo agrede a los pueblos libres del mundo, Venezuela propone desde Carabobo victorioso una cumbre de presidentes para que no se vuelva a repetir la locura de Adolfo Hitler y del fascismo que destruyó buena parte de la humanidad», expresó.
El significado histórico de Carabobo
El mandatario nacional dirigió un contundente mensaje al pueblo venezolano en el marco de la conmemoración del 204.° aniversario de la Batalla de Carabobo y Día del Ejército Bolivariano, donde reivindicó el carácter libertario y unitario de esta gesta histórica.
Destacó que esta efeméride representa mucho más que una simple fecha en el calendario patrio. Subrayó cómo esta batalla marcó el nacimiento de Venezuela como nación soberana.
«Carabobo es el punto de no retorno de nuestra historia incansable, es el instante en que dejamos de ser colonia avasallada por un imperio extranjero y nos atrevimos a ser República», afirmó el Jefe de Estado desde el Campo de Carabobo, ante una masiva concentración de pueblo y militares.
El presidente Maduro recordó el contraste entre la Venezuela de 1810, que apenas comenzaba su gesta independentista, y la de 1821, que logró derrotar al entonces imperio más poderoso del mundo.
Un ejército del pueblo y para el pueblo
El dignatario enfatizó el carácter popular del Ejército Libertador, que bajo el mando del Libertador Simón Bolívar logró la hazaña de Carabobo contra un enemigo militarmente superior. Resaltó cómo esta fuerza armada representaba el verdadero crisol de la venezolanidad.
«No era un ejército oligárquico aristocrático: era eminentemente popular, mestizo, libertario», expresó el Presidente, quien recordó figuras fundamentales como el Negro Primero y los «pata en el suelo» que formaron parte de esta gesta.
El mandatario hizo especial hincapié en que la victoria de Carabobo trascendió lo militar para convertirse en un acto de unidad nacional y afirmación cultural, citando al prócer cubano José Martí: «en Carabobo murió Hernán Cortés».
Vigencia del legado Bolivariano
El Comandante en Jefe conectó el significado histórico de Carabobo con los desafíos actuales de Venezuela y la Patria Grande, reafirmando los principios antiimperialistas que guían la política exterior del país.
«Carabobo no es solo de Venezuela: es de toda nuestra América, la América Latina Caribeña», señaló el presidente Maduro, quien recordó las palabras de Bolívar sobre el triunfo como victoria de las armas de Colombia la Grande.
El Jefe de Estado destacó el llamando a mantener viva la llama de Carabobo en la defensa de la soberanía nacional y en la construcción de la Patria Grande que soñó el Libertador.
Maduro hizo un llamado a las nuevas generaciones para asumir el liderazgo en la defensa de la soberanía nacional, adaptando el legado histórico a los desafíos del siglo XXI.
«Ser joven hoy debe ser protagonizar el nuevo Carabobo. Es organizarse, crear comunidad, rechazar cualquier tipo de individualismo», exhortó Maduro, al definir a la juventud como «la nueva columna vertebral de la independencia del siglo XXI».
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