Kanye West vuelve a estar en el ojo del huracán mediático, esta vez por una demanda presentada en su contra por su exasistente, Lauren Pisciotta. Según documentos consultados por TMZ, la joven modelo acusa al rapero de acoso sexual, incumplimiento de contrato, despido injustificado y crear un ambiente de trabajo hostil durante su tiempo juntos.
La historia de Pisciotta con West comenzó cuando este la contrató para trabajar en su línea de moda y colaborar en videoclips. Sin embargo, la situación dio un giro inesperado cuando el artista le ofreció un millón de dólares al año a cambio de que eliminara su perfil en Only Fans y se convirtiera en su asistente personal. Aceptó la oferta y comenzó a desempeñar sus nuevas funciones, pero pronto se vio envuelta en una serie de situaciones incómodas.
Según la demanda, Pisciotta recibía mensajes subidos de tono y videos explícitos de West, además de enfrentarse a preguntas invasivas sobre su vida personal. Incluso fue obligada a quitarse prendas de vestir en su propia casa por considerarlas inapropiadas. A pesar de ser ascendida a jefa de personal con un salario de cuatro millones de dólares, fue despedida sin motivo aparente un mes después, dejándola sin la indemnización prometida.
Esta demanda se suma a otras acusaciones recientes contra Kanye West, incluyendo una por racismo presentada por un exmiembro de su equipo de seguridad afroamericano que fue despedido por negarse a raparse las rastas. El cantante se encuentra ahora en medio de un torbellino legal que amenaza con empañar su reputación pública.