El multimillonario Elon Musk, propietario de la plataforma X (ex-Twitter), exigió la dimisión o destitución del juez Alexandre de Moraes, miembro de la Corte Suprema de Brasil.
Musk acusa a Moraes de “censura” por el bloqueo de cuentas de su plataforma sospechosas de difundir desinformación.
Musk, también jefe de Tesla y SpaceX, afirmó en la red social que adquirió mayoritariamente en 2022 que Moraes ha traicionado descarada y repetidamente la Constitución y al pueblo de Brasil. El empresario prometió publicar próximamente todas las solicitudes judiciales de Moraes y cómo estas solicitudes violan la ley.
El sábado por la noche, Musk inició una serie de ataques contra el alto magistrado en X, diciendo que iba a impugnar sus decisiones legales levantando todas las restricciones que le impusieron. A pesar de las posibles consecuencias financieras, Musk insistió en que los principios son más importantes que las ganancias.
Alexandre de Moraes, un juez de carácter férreo y figura divisiva, es uno de los 11 miembros del Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF). También preside el Tribunal Superior Electoral (TSE), encargado de organizar y supervisar las instancias de votación popular. Moraes lidera la lucha contra la desinformación en Brasil, bloqueando cuentas de figuras influyentes en las redes sociales, la mayoría de ellos simpatizantes del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro.
Musk muestra un creciente interés en América Latina, utilizando su red social X para expresar ideas que coinciden con las de los conservadores. A pesar de sus declaraciones políticas, Musk insiste en que no se le encasille políticamente.
El magnate está buscando conquistar el mercado latinoamericano con su compañía proveedora de satélites de internet, Starlink, que mejora la conectividad. Ya logró avances en países como Chile y Brasil, y en México cerró varios contratos con Starlink y planea construir una nueva fábrica de Tesla.