En un intento por equilibrar las agresivas restricciones en la frontera que anunció recientemente, el presidente Joe Biden ordenó el martes una medida expansiva para ofrecer la posibilidad de naturalización a cientos de miles de inmigrantes que viven en Estados Unidos sin estatus legal.
La medida, que podría afectar a casi 500 mil personas, permitirá que algunos cónyuges de ciudadanos estadounidenses sin estatus legal soliciten la residencia permanente y, posteriormente, su naturalización.
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Durante un evento en la Casa Blanca, Biden destacó que la medida es un esfuerzo para proteger la frontera mientras también abraza la inmigración.
«La Estatua de la Libertad no es una reliquia de la historia estadounidense. Sigue representando lo que somos. Pero también me niego a creer que para que sigamos siendo un Estados Unidos que abraza la inmigración, tengamos que renunciar a proteger nuestra frontera», dijo.
La medida, que representa la protección federal más amplia para los inmigrantes en más de una década, establece un importante contraste político con la postura migratoria del candidato presidencial republicano, Donald Trump, quien ha propuesto deportaciones masivas y una retórica que tacha a los inmigrantes de criminales peligrosos.
Biden acusó a su predecesor de aprovecharse de los temores sobre los inmigrantes y criticó las medidas del gobierno de Trump, como la política de tolerancia cero en la frontera sur, que llevó a la separación de familias.
Para poder ampararse al programa, una persona debe llevar en Estados Unidos un mínimo de 10 años y estar casada con un ciudadano estadounidense. Si se aprueba su solicitud, la persona tendría tres años para pedir la residencia permanente y recibiría un permiso temporal de trabajo, además de quedar protegida de la deportación durante el proceso.
También unos 50.000 niños no ciudadanos con un progenitor casado con un ciudadano estadounidense podrían seguir el mismo proceso.
Today, I’m announcing new measures to speed up work visas to help people – including Dreamers – who've graduated from U.S. colleges and universities land jobs in high-demand high-skilled professions.
It's good for business.
It's good for the economy.
It's good for America. pic.twitter.com/IyIN5jQzzs
— President Biden (@POTUS) June 19, 2024
Altos funcionarios del gobierno creen que el proceso de solicitudes comenzará al final del verano, y dijeron que las tarifas aplicables aún estaban por determinarse. El anuncio fue una buena noticia para las familias con estatus migratorio mixto, como Antonio y Brenda Valle, de Los Ángeles, que han estado casados durante casi 12 años y tienen dos hijos que son ciudadanos estadounidenses.
Los republicanos, sin embargo, marcaron sus propios contrastes con el plan de Biden. El representante Richard Hudson, presidente del equipo de campaña de los republicanos en la Cámara de Representantes, se refirió a la medida de Biden como un «plan de amnistía en masa».
Otros republicanos, como el gobernador de Texas, Greg Abbott, afirmaron que la directriz será anulada por los tribunales.El senador Marco Rubio, un republicano de Florida que figura como posible compañero de fórmula de Trump, defendió firmemente una medida en 2012 que habría ofrecido estatus legal a inmigrantes jóvenes, pero el martes señaló que «el mundo es distinto» en este momento debido al aumento en la inmigración.
Los aliados de Biden creen que la postura que está asumiendo con las dos acciones en materia migratoria de este mes tendrá un gran impacto entre los votantes. «La única parte que toma en serio la seguridad fronteriza son los demócratas.
La única parte que está siendo considerada y compasiva sobre lo que hacemos con las personas que viven en las sombras son los demócratas», dijo el senador Chris Murphy, un demócrata de Connecticut que ayudó a redactar la iniciativa fronteriza bipartidista de principios de este año.
Entre los activistas, Gustavo Torres, director ejecutivo de CASA, aseguró que el anuncio de Biden estimularía a las comunidades hispanas para brindarle su apoyo al presidente. «Esto es lo que necesitaban nuestras comunidades para respaldar al presidente Biden para la reelección», puntualizó.
Biden también dio a conocer nuevas regulaciones que permitirán que ciertos beneficiarios de DACA y otros jóvenes inmigrantes tengan un acceso más sencillo a visas de trabajo. Eso le permitiría a los inmigrantes elegibles contar con protecciones más sólidas a las que ofrecen los permisos de trabajo del DACA, el cual enfrenta impugnaciones legales en estos momentos y no está recibiendo nuevas solicitudes.
La medida expandiría la autoridad que usaron los presidentes George W. Bush y Barack Obama para otorgar «permisos de permanencia temporal en el país» a familiares de miembros de las fuerzas armadas, dijo Andrea Flores, exasesora política en los gobiernos de Obama y Biden y actual vicepresidenta de FWD.us, una organización defensora de la inmigración.
El proceso de permiso de permanencia temporal otorga a los migrantes una vía hacia la residencia permanente en Estados Unidos sin salir del país, retirando un obstáculo común para quienes no cuentan con estatus legal pero están casados con un estadounidense.
Los mismos progresistas que se enfurecieron con la orden de asilo de Biden elogiaron el martes al presidente. La representante Pramila Jayapal, demócrata por Washington y presidenta de la bancada progresista en el Congreso, felicitó a Biden, y señaló que estas acciones ayudarán a mantener unidas a las familias estadounidenses.
«Muchos estadounidenses estarían sorprendidos de escuchar que cuando un ciudadano estadounidense se casa con una persona indocumentada, su cónyuge no es elegible automáticamente para la ciudadanía estadounidense», comentó.
«Imagínense amar a alguien, casarse con esa persona, y luego seguir con miedo de que serán separados».